miércoles, 20 de marzo de 2013

Un microlaboratorio debajo de la piel

imagePor todos es bien sabido que los suizos se han caracterizado por construir los mejores y más famosos relojes del mundo. Perfección, solidez y sobre todo mecanismos miniaturizados han hecho las delicias de millones de personas poseedoras de dichas maravillas. Ahora de nuevo científicos suizos demuestran su dominio de las miniaturas y construyen un chip que es capaz de analizar la sangre y advertir del riesgo de infarto en tan sólo 14 mm…fijaos en la foto…

Lo primero que se nos pasa por la cabeza es…bueno y ¿de dónde saca la energía? Pues bien, en el momento en que se quiere obtener información un pequeño dispositivo del tamaño de una tarjeta de crédito se coloca sobre la zona de la piel donde se encuentra el chip, de este modo, se induce su carga y emite los resultados vía Bluetooth a cualquier dispositivo que cuente con esta tecnología, ya sea un ordenador, una tableta o el propio teléfono móvil.

Esta obra de ingeniería es capaz de analizar hasta 5 substancias diferentes en sangre y es tan preciso como cualquier otro análisis de los de aguja y ambulatorio. En este dispositivo entran en juego los biosensores, enzimas anclados a superficies capaces de unir, por ejemplo, lactato, glucosa, ATP…y que según la unión del sustrato al enzima producen una señal más o menos intensa que es interpretada y convertida de forma analógica para dar un resultado numérico o cualitativo.

En este caso los 5 biosensores controlan sustancias que se usan comoclip_image002 marcadores de infarto, con lo cual se puede prevenir el infarto o remediarlo a tiempo reduciendo al máximo las secuelas, ya que el tiempo de respuesta es clave en la mayoría de estos casos.

Muchos de vosotros estaréis pensando…bueno, alguna desventaja debe tener… Pues sí, la tiene, y es que los enzimas tienen una vida media relativamente corta, y aunque han sido ingenierizados lo máximo posible el dispositivo ha sido testado con éxito durante aproximadamente un mes y medio.

Sin embargo, para nada es un inconveniente y estoy seguro que tal vez esa cifra ,con el tiempo, mejore y hay que tener en cuenta que el potencial del chip es muy grande, sobre todo si hablamos de tratamientos quimioterápicos. Imaginad poner sensores que sean capaces de detectar los marcadores tumorales al momento y calcular la dosis de quimioterápicos y otros medicamentos sin tener que pasar por laboratorio cada vez, reduciendo costes y aumentando el bienestar del paciente.

Y no creáis que queda mucho para ver esto…los creadores han dicho que e unos 4 años podría comercializarse, con lo cuál es más que real. Y ahora ,y como toque de atención a los críticos de la investigación básica, ¿de dónde creéis que salen todas la técnicas para inmovilizar los enzimas a los sensores? ¿y de dónde creéis que salen las modificaciones de los enzimas para aumentar su vida media? ¿De la nada? No, de la investigación básica o semi-aplicada como la que realiza gente en sus tesis, en el día a día en el laboratorio, a base de prueba y error…es fácil hacer ciencia aplicada cuando otros han allanado el camino...

Después de este pequeño toque de atención os dejo con un video donde se explica el dispositivo:

2 comentarios :

Anónimo dijo...

Saludos David,

Me parece fenomenal todo lo que sirva para mejorar realmente la salud o la comodidad de las personas, sin embargo, estás haciendo elogios a una tecnología (la de los microchips implantados en los seres humanos, con uno u otro fin) que tiene una cara B tremendamente negativa.

No solamente existen microchips vinculados con temas de salud como el referido en este post, hay otros que sirven para la seguridad (por si un niño se pierde o es secuestrado, por ejemplo, poder localizarlo) o simplemente para poder disfrutar de entradas VIP en ciertas discotecas y fiestas. Microchips que sustituyen a las tarjetas de crédito, documentos oficiales (DNI, pasaportes...), que almacenan datos sobre la salud, transacciones de dinero, viajes, etc de una persona.

Estos microchips están siendo producidos por un conjunto de grandes multinacionales. ¿Imaginas si la gente empieza a implantarse estos chips a si mismos o sus hijos, por los motivos arriba dichos: salud, seguridad o comodidad? Estas personas

1) Siempre estarán localizadas por medio de GPS. Nunca podrán librarse de eso, ya que es muy difícil extraer un microchip pues contienen litio, el cual, si entra al torrente sanguíneo es altamente tóxico (al igual que los chips de los perros, no son nada fáciles de quitar).

2) Serán registrados todos sus datos, transacciones (compras, ingresos...) los lugares por donde ha estado cada día, prácticamente no tendría intimidad mientras hiciera uso de ese chip. Sé que este no es el chip al que tú haces referencia, no ibstante no se aleja demasiado, pues le sirve para almacenar datos de su persona, queda registrado cada vez que va al médico pide información de su salud y dónde lo hace. Es una pérdida importante de intimidad. Nadie debiera saber por qué esa persona va al médico ni lo que ha hecho ni cuándo fue. Con ese chip, queda registrado.

Les recomiendo que NO se implanten microchips de ninguna clase a ustedes mismos ni a otros seres humanos. Y que busquen toda la información sobre ello antes. No todo es tan bonito, claro que tiene desventajas, la pérdida de intimidad (tanto mayor cuanto más "útil" sea ese chip). Saludos.

David Talens Perales dijo...

Esa cara B que tu comentas puede que exista con el chip, pero de hecho ya existe en el momento que cualquiera que nosotros tengamos un teléfono móvil. Con el es suficiente para saber dónde hemos estado a cada momento...también podrían poner un chip en un marcapasos o cualquier otra prótesis sin que nos enterásemos...hay que intentar confiar en la bondad de las personas...Un saludo y gracias por comentar.